Las casetas del populoso mercado Mutualista en Santa Cruz comenzaron a quemarse la noche de ayer domingo, justamente al día siguiente de que los gremialistas anunciaron que no acatarán el anunciado paro de 48 horas decidido por la Gobernación y el Comité Cívico cruceños, a la cabeza de otras instituciones totalmente controladas por la derecha, como la Universidad Gabriel René Moreno. Aunque se desconocen las causas que originaron este desastre, llamó enormemente la atención que los pocos hidrantes de la zona no tenían agua, por lo que el fuego que inició en algunos puestos pudo extenderse rápidamente. Vanos fueron los esfuerzos de los comerciantes, que trataron de recuperar la mercadería que tenían en sus kioscos, arriesgando sus vidas. Con la llegada de los bomberos y colaboración de los mismos comerciantes se combatió el siniestro; luego, cuando arribó al lugar Luis Fernando Camacho, fue recibido con mucha hostilidad porque varios comerciantes abiertamente lo acusaron de estar detrás
Por: Reymi Ferreira
El domingo, sin sorpresa, Horacio Cartes, candidato del Partido Colorado, ha sido elegido presidente de Paraguay. A diferencia de lo sucedido en Venezuela, la oposición liberal y las otras candidaturas de izquierda reconocieron la victoria de los ‘colorados’, reconocimiento al que se sumó la Unasur.
El Partido Colorado vuelve al poder en el que estuvo 61 años y del que fue sacado por un breve lapso de cinco años por una coalición de la derecha liberal y por la izquierda a la cabeza de Fernando Lugo. De las seis décadas del Gobierno colorado, la mayor parte correspondió al régimen de Alfredo Stroessner, cuyo Gobierno represivo adoptó políticas económicas y sociales excluyentes que condujeron a Paraguay al aislacionismo en el ámbito internacional, en la senda implantada por Gaspar Francia en el siglo XIX.
El retorno de un partido poco democrático, signado por la corrupción y la exclusión social, no parece preocupar a los analistas, y menos les preocupa los antecedentes del presidente electo Horacio Cartes, empresario tabacalero y banquero multimillonario. Según las fuentes de Wiki Leaks de 2010, Cartes estuvo en la mira de la agencia antidroga estadounidense, y en 1985 fue demandado por el Estado paraguayo por el desfalco de 35 millones de dólares, resultado de la utilización especulativa de divisas, en un proceso oscuro del que fue absuelto. Habría que añadir que aún no terminan de aclararse las denuncias sobre supuestos sicarios bolivianos contratados para asesinar a este personaje.
La victoria de Cartes es irrebatible. El Gobierno de Lugo y de su sucesor, Franco, culmina con el retorno de un partido de no buen recuerdo para la democracia. Para Bolivia, es posible que la victoria de Cartes signifique el retorno a las frías relaciones del pasado. Sin embargo, el mayor problema para el país puede darse si Paraguay decide vetar el ingreso de Bolivia al Mercosur por motivos ideológicos, como en su momento lo hizo el Senado brasileño contra Venezuela.
Hay quienes creen que el giro que dieron los países latinoamericanos hacia la izquierda se debilita con la victoria del ‘coloradismo’ en Paraguay, pero lo que se debilita ciertamente son los vientos de cambio que se dieron en el continente que permitieron que países como México o Paraguay, gobernados por más de medio siglo por partidos autoritarios, fueran remplazados por opciones que abrieron el multipartidismo como alternativa política.
El autor es abogado, vive en Santa Cruz de la Sierra
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