Ir al contenido principal

El fascismo está actuando en Santa Cruz, el gobierno debe investigar

Las casetas del populoso mercado Mutualista en Santa Cruz comenzaron a quemarse la noche de ayer domingo, justamente al día siguiente de que los gremialistas anunciaron que no acatarán el anunciado paro de 48 horas decidido por la Gobernación y el Comité Cívico cruceños, a la cabeza de otras instituciones totalmente controladas por la derecha, como la Universidad Gabriel René Moreno. Aunque se desconocen las causas que originaron este desastre, llamó enormemente la atención que los pocos hidrantes de la zona no tenían agua, por lo que el fuego que inició en algunos puestos pudo extenderse rápidamente. Vanos fueron los esfuerzos de los comerciantes, que trataron de recuperar la mercadería que tenían en sus kioscos, arriesgando sus vidas. Con la llegada de los bomberos y colaboración de los mismos comerciantes se combatió el siniestro; luego, cuando arribó al lugar Luis Fernando Camacho, fue recibido con mucha hostilidad porque varios comerciantes abiertamente lo acusaron de estar detrás

Un Brasil en retroceso, alerta ante un eventual golpe dentro del golpe

Por: Juraima Almeida
El 2018 da la oportunidad a los brasileños de optar entre la posibilidad de construcción de una sociedad mínimamente igualitaria o la consolidación definitiva de un proyecto expoliador, represivo, antipopular, siempre y cuando se realicen las elecciones presidenciales y no se produzca un golpe dentro del golpe para impedir, a toda costa, la participación del exmandatario Lula de Silva en ellas.
Las señales son confusas y es difícil que quienes hoy detentan el poder se pongan la soga al cuello: las elecciones no están aseguradas, y harán lo imposible para impedir la elección del expresidente, inclusive un nuevo golpe que conlleva al vaciamiento del presidencialismo o de un enmienda constitucional (eludiendo la consulta popular) que dicte un parlamentarismo de hecho, o una presidencia colegiada, con jueces y quizá militares.br lula elección.
Durante el gobierno golpista Brasil ha retrocedido en todas las áreas, suprimiendo y destruyendo los derechos sociales y concentrando la riqueza en la mano de los más ricos, con aumento expresivo en el precio del gas, la gasolina y la electricidad, cortes en el salario mínimo, en la salud y reducción de inversiones en las universidades, cortes drásticos en la educación, en la investigación y en toda el área social.
No hay esperanza con este gobierno de facto: las medidas anunciadas para 2018 van a agravar aún más este cuadro: Son los más pobres quienes pagarán la cuenta de la reforma de la seguridad social que no afecta a los ricos, los parlamentarios, los jueces ni los militares. Es que para fines de 2017 los “nuevos pobres” sumaron 3,6 millones, mientras Naciones Unidas anunciaba que Brasil retorna al Mapa del hambre.
Solo un nuevo pacto popular alejará del horizonte las amenazas de hoy, que no se reducen a las consecuencias del neoliberalismo radical sino a la radicalización conservadora, como pensamiento, acción, política, gobierno, valores sociales e ideología. El conflicto que no favorece los proyectos de conciliación de clase, presidirá las maniobras de la derecha y condicionará los movimientos del campo popular, independientemente de los partidos y de las candidaturas conocidas y aquéllas por ser anunciadas, señala el exministro de Ciencia y Tecnología, Roberto Amaral.
El académico Liszt Vieira señala que mientras se producen aumentos de impuestos, por un lado, por el otro se perdonan deudas multimillonarias de grandes empresas y se decreta la exención de impuestos a las empresas multinacionales de petróleo. Los medios de comunicación hegemónicos aplauden las reformas presentándolas como esenciales al interés nacional.
El Poder Judicial, cada vez más participante en temas que no le debieran concernir, parece sintonizado con los mismos intereses, al igual que los mandos policiales. A partir del golpe de 2016, la radicalización creció, se expandió y se profundiza a favor del poder económico, bajo el liderazgo del capital financiero y el monopolio de los medios de comunicación, uno y otro “estados” dentro del Estado, que actúan en consonancia y son portavoces del poder fáctico, más allá de los tres poderes constitucionales.
Más allá de los medios de comunicación de masas, en su permanente deconstrucción de la imagen del expresidente, actúan coordinadamente el poder judicial (de jueces como Sergio Moro hasta el Supremo Tribunal Federal, el Tribunal Supremo Electoral y los tribunales superiores regionales), la Fiscalía General y la Policía Federal. La intención no es comprobar presuntas irregularidades cometidas por Lula, sino impedir hoy su candidatura; mañana, su elección y su gobierno, aunque sea a costa de su libertad, amenazada por condenas anunciadas.
Lula promete un nuevo manifiesto-compromiso, dirigido ahora al pueblo (y no como en 2002 a los banqueros), a trabajadores y campesinos, proletarios urbanos que sobreviven en los servicios y a aquellos sectores de la clase media perdidos en el último quinquenio. Aun cuando Lula quiera fortalecer su imagen de conciliador, estará presionado por las circunstancias.
La gran ofensiva de la derecha intenta privatizar todo lo posible, hasta el Jardín Botánico de Río. Luchar contra las zancadillas que intentan impedir que Lula sea candidato en 2018 y levantarse en la defensa de la democracia y los intereses de la nación, puestos en riesgo por el entreguismo más descarado, son las tares del espectro popular, en busca de unidad táctica, estratégica y de acción.
Revertir el grave retroceso será la gran tarea del gobierno que sea elegido en noviembre de 2018. Si un golpe dentro del golpe no lo frena, claro.

Investigadora brasileña del Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)

Comentarios

Entradas populares de este blog

El mapamundi actual miente

Por: Xavier Albó El mapamundi que está y se mantiene en todas nuestras escuelas y unidades educativas es mentiroso y deliberadamente colonizador. Y con ello, tiene efectos mucho más nefastos y generalizados que el reloj dextrógiro que estaba en el Parlamento y que la Cancillería ya ha cambiado por otro levógiro, como sin duda correspondería al hemisferio Sur. Los relojes digitales sin agujas ya no necesitan tal revisión. Cuando el geógrafo Mercator hizo esa proyección bidimensional de una realidad tridimensional y curva a solo dos dimensiones planas, tuvo una gran aceptación porque permitía reducir a planos universales la longitud y latitud con relación al globo terráqueo. Aplicada a niveles muy locales, esa proyección no tiene problemas; pero cuando se lo utiliza para todo el mundo, introduce distorsiones totalmente inaceptables y que, con nuestros actuales conocimientos y tecnologías, ya resultan simplemente mentirosos y neocolonialistas. Resume Eduardo Galeano: “El mapamu

Premiar el trabajo, no la riqueza

Informe de desigualdad de Oxfam Para poner fin a la crisis de desigualdad, debemos construir una economía para los trabajadores, no para los ricos y poderosos. En 2016, el grupo Inditexa, al que pertenece la cadena de tiendas de moda Zara, repartió dividendos por valor de cerca de 1.300 millones de euros al cuarto hombre más rico del mundo, Armancio Ortega. Stefan Parsson, hijo del fundador de H&M y que ocupa el puesto 43 en la lista Forbes de las personas más ricas del mundo, recibió 658 milones de euros en concepto de dividendos el año pasado. Anju vive en Bangladesh y trabaja confeccionando ropa para la exportación. Suele trabajar 12 horas al dá hasta muy tarde. A menudo tiene que saltarse comidas porque no ha conseguido suficiente dinero. Gana poco más de 900 dólares al año. El año pasado, el número de personas cuyas fortunas superan los mil millones alcanzó su máximo histórico, con un nuevo milmillonario cada dos días. En este momento hay 2.043 milmillonar

La despatriarcalización

Por: Julieta Paredes Al igual que el Seguro Universal de Salud (SUS), la despatriarcalización, como nombre para una política pública, tardó mucho, pero llegó. Entonces, en este marzo de luchas de las obreras, es necesario analizar, ¿qué es lo que realmente llegó? Fruto de una serie de movilizaciones de mujeres pertenecientes a las organizaciones sociales del proceso de cambio, se lograron algunas medidas en el Ejecutivo. Fueron movilizaciones que se realizaron a lo largo del año pasado, con encuentros departamentales. Así fue que se logró concretar un listado de demandas que más o menos se repitieron a lo largo de estos años, con algunas interesantes novedades. Entre ellas podemos señalar la exigencia del salario al trabajo doméstico y la necesidad de un espacio en el Gobierno para este sector. Algo así como un Ministerio de las Mujeres, instancia que tenga la jerarquía necesaria para efectuar las tareas que corresponden a la mitad de la población de Bolivia que somos las mu